martes, 30 de noviembre de 2010

Excursión a Gallocanta y Río Piedra

El pasado sábado, a las seis de la mañana, partíamos rumbo a Gallocanta, en un gélida mañana en la que el mercurio llegó a desplomarse hasta los -8ºC.

Llegando a las proximidades de la laguna, ya en la provincia de Zaragoza, empezaron a verse grupos bastante numerosos de grullas alimentándose en los sembrados y rastrojos.

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grandes grupos de grullas se alimentan durante el día en los campos cercanos a la laguna de Gallocanta

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También se dejaron ver algunas rapaces ligadas a los medios agrícolas, como varios esmerejones, un elegante macho de aguilucho pálido, un mochuelo y la sorpresa de la mañana… una pareja de águilas reales posadas en un gran majano; se trataba de dos ejemplares adultos (presumiblemente macho y hembra), de color oscuro y con un hermoso plumaje dorado en la cabeza…

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Ya en la laguna de Gallocanta varios grupos de grullas descansaban todavía en las orillas. En el centro de la laguna se agrupaban un gran número de anátidas, difíciles de identificar dada la lejanía… No obstante, desde el observatorio elevado de “la reguera”, se pudieron distinguir ánade real, ánade rabudo, ánade silbón, ánade friso, pato cuchara, tarro blanco, porrón europeo, cerceta común, etc.; también alguna agachadiza común, rascón, escribanos palustres y grandes bandos mixtos de fringílidos formados por pardillos, jilgueros, verderones, pinzones, etc.

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panorámica de la laguna de Gallocanta; un gran número de grullas descansa en la orilla; al fondo el pueblo de Berrueco
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Después de una vuelta completa a la laguna y visita al centro de interpretación llegó la “hora h”… Al anochecer las grullas regresan desde los campos aledaños (donde han pasado el día alimentándose) a la laguna (donde pasan la noche agrupadas)… en apenas una hora miles de grullas (en estos días habían censado más de 11.000) sobrevuelan la zona, recortando sus siluetas contra un cielo pintado de rojos y morados y emitiendo su característico trompeteo… gru, gru, gru… que te envuelve por todas partes…

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un grupo de grullas regresa al dormidero al anochecer
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A la mañana siguiente la operación inversa… ver la salida de las grullas al amanecer... La noche había estado rasa, dejando una helada de las buenas (otra vez -8ºC) que vestía todos los campos de blanco… Con las primeras luces del alba, antes de salir el sol, las grullas empezaron a despertarse y, después de una algarabía general (gru, gru, gru…), comenzaron a salir en grupos abandonando la laguna…

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"pájaros" y pajareros se daban cita a primera hora de la mañana

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poco a poco las grullas iban abandonando el dormidero

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Como colofón, el sol comenzó a asomarse por detrás de la sierra, dejando un amanecer espectacular…

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primeros rayos de luz de un amanecer gélido en Gallocanta
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El plan para el resto del día era hacer una pequeña ruta por el barranco del río Piedra. De camino aprovechamos para pajarear un rato por las campiñas y páramos de la zona… una vez más esmerejones y aguiluchos, pálidos y laguneros, sobrevolaban los campos en busca de alimento; algo muy interesante fue ver un numeroso bando de ortegas (40-50) que alzaron el vuelo a nuestro paso… y cuatro corzos con su típico pelaje gris de invierno, que les hace parecer mucho más grandes, y que pudimos ver muy cerca…

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Ya cerca del río Piedra, en unas laderas pedregosas salpicadas de enebros y sabinas, los zorzales campaban a sus anchas (se dejaron ver el común, el charlo y el real); también escribanos montesinos y alguna tarabilla. Por último, las paredes del barranco guardaban las últimas sorpresas de la excursión: buitres leonados, cornejas y chovas piquirrojas se dejaban ver con facilidad, no así el treparriscos (“el pájaro mariposa”), uno de los “objetivos” que “perseguíamos” en esta zona y que finalmente conseguimos localizar, aunque alguno se quedó sin verlo… jejeje… Un lustroso macho de halcón peregrino posado en su atalaya nos regaló un último momento pajaril antes de emprender la vuelta a casa…

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de ruta por el barranco del río Piedra
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En definitiva, un viaje muy provechoso en el que, aunque pasamos “fresco”, disfrutamos y vimos muchas cosas.

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foto de grupo en el río Piedra: Almudena, Javi, Miguel L., Belén, Miguel H., Paquillo, Hugo y Vicky

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* puede consultarse la lista de especies observadas en los comentarios de esta misma entrada

2 comentarios:

  1. Agachadiza común
    Águila real
    Aguilucho lagunero
    Aguilucho pálido
    Alcaudón meridional
    Alondra
    Ánade friso
    Ánade rabudo
    Ánade real
    Ánade silbón
    Arrendajo
    Avefría
    Bisbita común
    Buitre leonado
    Carbonero común
    Cerceta común
    Cernícalo
    Cetia ruiseñor
    Chochín
    Chova piquirroja
    Cogujada
    Corneja
    Cuervo
    Escribano palustre
    Esmerejón
    Estornino negro
    Gavilán
    Gaviota reidora
    Gorrión chillón
    Gorrión común
    Grulla
    Halcón peregrino
    Herrerillo común
    Jilguero
    Lúgano
    Mirlo común
    Mochuelo
    Ortega
    Paloma bravía
    Pardillo
    Pato cuchara
    Pinzón vulgar
    Pito real
    Porrón europeo
    Rascón
    Ratonero
    Reyezuelo listado
    Tarabilla común
    Tarro blanco
    Tórtola turca
    Treparriscos
    Triguero
    Urraca
    Verderón común
    Zorzal charlo
    Zorzal común
    Zorzal real

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  2. Estupenda crónica y fabulosas fotos. Gracias por compartirlo con los que últimamente no nos calzamos las botas...

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